Se puede realizar en cualquier tipo de piel y en cualquier época del año. Las puntas son de diferente textura para poder realizar un tratamiento suave o intenso, tratar áreas delicadas como contorno de ojos y labios, cuello o todo el rostro haciendo énfasis en las imperfecciones.
Este tratamiento es ideal para secuelas de acné, envejecimiento de la piel, cicatrices pequeñas, manchas en el rostro y líneas de expresión. También se puede realizar en el cuerpo para mejorar las estrías, exfoliar la espalda, brazos o piernas.
Cada sesión es de 1 hora 20 minutos, primero se limpia la piel con una leche de limpieza, luego se realiza el peeling de diamantes en todo el rostro y por último se nutre e hidrata la piel con cremas y mascarillas indicadas para el tipo de tu piel.
Los cuidados que se requieren, luego de aplicar el tratamiento, son: no usar ningún exfoliante o crema abrasiva por 48 horas, usar protector solar.
En conclusión, sus ventajas son muchas: se puede aplicar a todo tipo de pieles; en cualquier época del año; su costo no es alto; no utiliza químicos; no es agresivo; el mismo procedimiento limpia, tonifica, humecta y exfolia la piel; no exige un período de recuperación y no posee efectos colaterales.